La crítica tarea de tomar y rendir cuenta
Existen varios factores que inciden en la realización de una buena gestión institucional. Entre esos destaca una capacidad poco difundida que es la capacidad de “rendir cuenta” y de “tomar cuenta”. En este contexto, los trabajadores manuales e intelectuales, funcionarios y empleados, deben tener siempre claro a quien deben dar cuenta de su desempeño (performance) laboral. Además, es también importante que el encargado de “tomar cuenta” se halle a la altura de las circunstancias y ejerza su prerrogativa con eficacia. En el sector privado este problema no necesita mucha aclaración porque generalmente la relación entre quienes deben “rendir cuenta” de sus actos y quienes deben “tomar cuenta” de los mismos queda implícita, por la misma naturaleza de la empresa. Sin embargo, es preciso recordar que detrás de los grandes fracasos empresariales se halla el hecho que en las grandes sociedades anónimas este importante elemento de gestión se ve relajado porque el dueño de la empresa es práctica...